Continuamos sin crear empleo en términos reales, el 23,80% de los parados del conjunto del Estado son andaluces, casi cuatro décimas más que en enero. La tasa de población en riesgo de pobreza y exclusión social se mantiene en valores inaceptables como consecuencia del desempleo de larga duración.

El 10,74% de los parados son menores de 25 años, medio punto más que el mes pasado. Los jóvenes andaluces continúan siendo uno de los colectivos de trabajadores que, en mayor medida, están padeciendo las consecuencias de la crisis y de la precariedad instaurada en nuestro mercado laboral.

Las mujeres andaluzas siguen poniendo cara al desempleo y representan ya el 54,15% del total de parados.  Otro de los nefastos efectos de la crisis ha sido el incremento de las desigualdades laborales, dando al traste con lo conseguido durante décadas de lucha sindical.

Durante febrero, el paro en el grupo de trabajadores extranjeros se ha incrementado (2,30%). En términos interanuales, el paro se ha reducido (-9,88%), menos que en el Estado (-10,06%).

El sector servicios continúa recogiendo a más del  60% de nuestros parados (62,35%). Durante este mes, la construcción ha sido el único sector que ha reducido el paro. La débil economía andaluza, su pobre modelo productivo y una gestión empresarial ineficaz siguen imposibilitando un proyecto que asegure nuestro desarrollo socioeconómico en el largo plazo.

En febrero se realizaron 45.115 contratos menos que en el mes anterior, lo que supone una nueva importante caída del 11,91%. Además, los empresarios continúan recurriendo, de forma ilegal, a la contratación temporal. El 95,70% de los contratos de este mes han sido temporales.

42 de cada 100 desempleados andaluces no reciben ningún tipo de prestación por desempleo. Las consecuencias de esto sobre los niveles de pobreza y exclusión social son alarmantes.

Por último, durante febrero se ha reducido (-0,27%) el nivel de afiliación a la Seguridad Social. Con este descenso, la tasa interanual pasa a situarse en el 2,14%, casi un punto por debajo de la  registrada a nivel estatal (2,97%).

 

Por todo ello, desde UGT Andalucía exigimos:

A la UE y al resto de organismos internacionales el fin de las presiones neoliberales a las economías más débiles que no están haciendo más que continuar prolongando los efectos negativos de la crisis e incrementando las desigualdades sociales.

Al Gobierno de la Nación que finalmente se forme del complicado panorama político actual, la derogación de la Reforma Laboral y la inmediata puesta en marcha de medidas expansivas tendentes a generar empleo de calidad  y a reactivar la economía.

A la Junta de Andalucía una apuesta decidida por otra economía andaluza, donde la industria, la innovación y el empleo estable sirvan como base para asegurar la viabilidad de nuestro modelo productivo y, además, para hacernos progresar en términos de cohesión social.

A nuestros empresarios la modernización de su gestión empresarial, buscando la excelencia de la misma y dejando atrás un concepto obsoleto y erróneo de "trabajador = coste". Una buena política de personal es la base para incrementar la productividad de nuestras empresas y eso no se logra ni con el actual abuso de poder, ni con el continuo recurso a la contratación temporal, a la reducción de salarios y al empeoramiento de las condiciones de trabajo.

Puedes consultar aquí el informe del paro relativo a febrero