Para Carmen Castilla,  “los sindicatos no podíamos permitir que, a cambio de la prórroga del sistema, la patronal tumbara la parte de la protección que correspondía a los trabajadores. Si las empresas necesitan las ayudas para paralizar o ralentizar su actividad, hasta que pase la pandemia, los trabajadores necesitan la estabilidad suficiente para garantizarles que no serán despedidos”.

“UGT-A entiende que el sistema de los ERTE debe continuar hasta que termine la crisis derivada de la pandemia, por lo que demandamos otra prórroga hasta final de año, que habrá que seguir negociando”, ha señalado.

“Pero reiteramos el llamamiento que hemos hecho también a la Junta de Andalucía que, como gobierno autonómico, debe complementar las ayudas que el gobierno central no alcanza para todas las necesidades, especialmente para los sectores que son más relevantes, o los colectivos más afectados, en nuestra comunidad. La Junta debe incluir a los trabajadores fijos discontinuos en las prestaciones por ERTE aunque no hayan sido llamados por la situación excepcional; debe complementar la prestación a los trabajadores que no alcancen unos ingresos mínimos de subsistencia; y debe volver a poner en marcha, con urgencia la Renta Mínima de Inserción, para que sea complementaria con el Ingreso Mínimo Vital del Gobierno central”, ha concluido la líder regional de UGT.