La Unión de Jubiladas y Jubilados y Pensionistas de UGT (UJP-UGT) Granada informa sobre los asuntos tratados en la reunión mantenida el pasado 27 de noviembre con la concejala de Política Social, Familia, Discapacidad y Mayores del Ayuntamiento de Granada, Amparo Arrabal. Tras la reunión, Mercedes Martín, Secretaria General de UJP-UGT Granada, valora el encuentro y expone las reivindicaciones fundamentales para garantizar el bienestar de las más de 53.000 personas mayores de 65 años que residen en la capital.

La organización sindical pone el foco en la parálisis de los órganos consultivos municipales. Martín es tajante al respecto: «Solicitamos a la concejala que convoque la Asamblea del Consejo Municipal de Mayores. Según el reglamento, tiene que ser convocada como mínimo una vez al año y, desde que están gobernando, no ha habido ninguna convocatoria».

Para la UJP-UGT, la participación no es algo secundario, sino un derecho fundamental. «Hay que denominar a Granada “Ciudad Amiga de las Personas Mayores”. Con más de 53.000 personas mayores de 65 años censadas, es necesario poner en valor nuestra contribución, historia y experiencia, y aportar la participación real de los mayores en las decisiones municipales», afirma la representante e UGT

Uno de los puntos más críticos, opina la ugetista, es la situación de vulnerabilidad social. La ugetista destaca la urgencia de «reforzar y aumentar la asistencia a la soledad no deseada y las ayudas a domicilio». La líder sindical aporta datos preocupantes: «En Granada capital, según “Soledad Cero”, alrededor de un 26,5% de las personas mayores de 65 años se encuentra en situación de soledad no deseada; esto significa que podrían estar en esta situación más de 14.000 personas».

La Secretaria General de UJP-UGT Granada detalla el perfil y las consecuencias de esta problemática: «La soledad no deseada aumenta en la población a partir de los 65 años y alcanza al 20% en las personas mayores de 75 años. Según el Observatorio Estatal de la Soledad no Deseada, suele ser intensa y persistente, vinculada a la pérdida de familiares, limitaciones físicas y la dificultad de crear nuevos vínculos». Además, añade que esta situación «se agrava por la viudedad y la emigración de los hijos, por lo que muchas personas quedan solas. Esto tiene un impacto directo en la salud física y mental, ya que aumenta el riesgo de depresión, ansiedad o enfermedades cardiacas».

En cuanto a los recursos materiales, UJP-UGT exige una mejora sustancial en las infraestructuras. Martín declara: «Es necesario aumentar los Centros de Participación Activa, así como su personal y los horarios de apertura».

Sin embargo, el sindicato marca una línea roja respecto a la gestión de estos espacios. «No apoyamos que los usuarios o usuarias participen o asuman, en ningún caso, gestiones o responsabilidades en los centros. El objetivo de su asistencia es el ocio, las habilidades manuales y las capacidades cognitivas, no la carga administrativa», sentencia Martín..

La Unión de Jubilados y Pensionistas de UGT concluye recordando sus principios fundacionales. «La UJP-UGT defiende el modelo social y el estado de bienestar. Entre nuestros fines está actuar sobre los poderes públicos para que estos derechos sean respetados». y reafirmando el compromiso del sindicato: «mantenemos una reivindicación cotidiana por el aumento del bienestar social, económico e intelectual de las personas que conforman este colectivo, para lograr así una sociedad más justa y solidaria».