UGT, CSIF, ANPE, Ustea, y CCOO se han movilizado hoy en Granada frente a la Delegación Territorial de Educación de la Junta de Andalucía, para exigir a la Consejería de Educación y Formación Profesional que retome el diálogo y la negociación para incrementar las plantillas docentes, una necesidad que las organizaciones sindicales consideran urgentísima, para avanzar en medidas que refuercen el sistema educativo público andaluz y dignifiquen la labor del profesorado.

UGT, CSIF, ANPE, USTEA  y CCOO han exigido a la Consejería de Desarrollo Educativo y FP retomar las negociaciones sobre aumento de plantillas docentes.Las cinco organizaciones con representación en la Mesa Sectorial de Educación vienen reclamando el necesario aumento de las plantillas docentes desde el inicio de curso.

Ya en el mes de noviembre, UGT, CSIF, ANPE, USTEA y CCOO escribieron a la titular de la consejería demandando la apertura de la mesa de negociación sobre dicha cuestión. La Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional inició entonces las negociaciones, aunque con continuas dilaciones en las convocatorias, y con ausencia de borradores sobre los que poder trabajar.

Para las cinco centrales sindicales los retos a los que se enfrenta la educación pública hoy son inasumibles sin un crecimiento considerable de las plantillas docentes en Andalucía, y que deben concretarse en el aumento personal que atiende al alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo, la reducción del horario lectivo del profesorado, la disminución de la carga burocrática, la reducción de la ratio con el compromiso de la no supresión de unidades en la escuela pública, entre otras.

Tras meses de trabajo negociador, el pasado 1 de abril, la Consejería de Desarrollo Educativo, anunció que daba por concluidas las negociaciones sin haberse llegado a abordar ni siquiera un borrador inicial. La razón aducida por la Administración es la prórroga de los Presupuestos Generales del Estado, lo cual para los representantes del profesorado andaluz es simplemente una excusa, pues además de que se perseguía un acuerdo a largo plazo, la Junta de Andalucía cuenta con su propio presupuesto.