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UGT solicita crear un teléfono específico para canalizar las denuncias por agresión y acoso en las aulas

UGT solicita crear un teléfono específico para canalizar las denuncias por agresión y acoso en las aulas

03/05/2024 |

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Es evidente que el tratamiento de la conflictividad en los centros educativos es un asunto de vital importancia para el colectivo de enseñantes, por lo que a través del Comité de Seguridad y Salud del personal docente no universitario en la provincia de Sevilla se ha solicitado la creación de mecanismos para activar los protocolos. Hemos solicitado a la Delegación de Desarrollo Educativo, que implemente herramientas y medidas que faciliten la apertura de los mismos en los casos pertinentes, y hacemos un llamamiento para que cualquier miembro de la comunidad educativa que disponga de información sobre casos de acoso, agresión, violencia en las aulas, o situaciones punibles en general, traslade dicha información de manera eficaz a las administraciones públicas implicadas. Desde UGT creemos que es urgente tomar medidas ante aquellos hechos y situaciones que supongan una alteración del ambiente deseable en un centro educativo tales como amenazas, faltas de respeto, agresiones o alteración del orden propio de un aula, ya que son conductas intolerables que deben ser contestadas con medidas correctoras, pues a nuestro parecer la conflictividad en las aulas no puede suponer un impedimento en el magisterio diario. Asimismo, además de dar respuesta a este tipo de comportamientos, desde el Sindicato opinamos que dichas agresiones también han de ser recopiladas y evaluadas por la Administración para poder componer un mapa real de la conflictividad actual, toda vez que el análisis del contexto debe partir de datos concretos a fin de que podamos revertir la inercia que en los últimos años parece estar incrementando el número de casos y su gravedad. De igual forma, es muy importante poner de manifiesto que los profesionales del sector educativo deben ser respetados como cualquier otro ciudadano si bien, además, el profesorado tiene la consideración de autoridad en el ejercicio de sus funciones, por lo que dignificar la labor docente pasa por establecer líneas rojas: pues lo que no se permite fuera del aula, no se debe permitir dentro.