DATOS DEL IPC ENERO 2024

El IPC en Enero se iguala prácticamente con la tasa de inflación subyacente

Es necesario incrementar la capacidad adquisitiva de trabajadores y trabajadoras. Los datos del IPC del mes de enero sitúan la inflación anual en nuestra provincia en el 3,7%, una décima por debajo de la tasa en Andalucia y tres por encima de la tasa nacional. Al mismo tiempo la inflación anual provincial se sitúa una décima por debajo de la subyacente que disminuye una décima hasta el 3,6%. Respecto a la variación mensual de precios en Almería, estos subieron una décima.

15/02/2024 |

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En Andalucia, el nivel general de precios se elevó en cinco de  sus provincias. Sevilla (0,3%) se sitúa como la provincia donde más se encarecieron los precios, y Granada con un descenso de 0,1% en los mismos fue la única provincia andaluza que registró una tasa mensual negativa.

En cuando a la evolución en los últimos doce meses, los precios se incrementaron en todas las provincias andaluzas, siendo el más destacado en Córdoba (4,2%) superando cuatro décimas la media regional. En sentido opuesto, Jaén (3,5%) y Cádiz (3,6%) presentan las interanuales más reducidas. Así la diferencia interprovincial se reduce y pasa ahora a ser de siete décimas.

Los grupos que más destacan por su influencia en el aumento de la tasa anual han sido: Paquetes turísticos (11%), Vestido (10,1%), alimentos (7,5%) y bebidas alcohólicas (7,5%). Y los grupos con influencia negativa fueron: equipos de telefonía y fax (-9,2%), transporte (-7,3%),  y equipos audiovisuales ((-4,6%).

Respecto a la repercusión mensual los principales grupos que incrementaron  más destacadamente sus precios este mes fueron  electricidad, gas y otros combustibles (8,4%), tabaco (3,1%), y seguros (2%)., y en sentido contrario la mayor repercusión negativa mensual se dio en los grupos vestido (-13,4%), paquetes turísticos (-11,9%),  servicios de alojamiento (-8,9%)  y calzado (-8,6%).

Por otro lado, la subida de los precios de los alimentos duplica la inflación general y grupos como el de los aceites inicia el nuevo año registrando incrementos de más de un 43% respecto a enero de 2023, destacando  como los alimentos más inflacionistas el pescado fresco y congelado (3,7%), frutas en conserva y frutos secos (2,6%), y legumbres y hortalizas frescas (2,4%). El descenso de precios se dio  únicamente en la carne de ovino (-2,1%).

Los grupos de alimentos con interanuales negativas han sido la leche y productos lácteos (-0,3%),al tiempo que se han encarecido los aceites y grasas (43,4%), legumbres y hortalizas frescas (16,3%), frutas frescas (15,8%) y la carne de porcino (13,1%).

La Secretaria General de UGT Almería, Carmen Vidal, ha valorado negativamente el incremento de precios que se ha registrado en enero ya que provoca un importante repunte de la interanual con el consiguiente perjuicio para las economías domésticas y la repercusión negativa en el poder de compra de las familias. “Es necesario abordar la prórroga de las medidas anticrisis o mejorarlas por otras más eficientes adaptadas al nuevo contexto socioeconómico. Se necesitan medidas de control sobre el precio de los alimentos, ya  que estos han experimentado una subida exponencial en alimentos esenciales. Hay que recordar que en la provincia de Almería el salario medio es de 16.220 euros, lo que supone 5.000 euros menos que la media del país según la Agencia Tributaria”

“Por otro lado el incremento del SMI hasta los 1.134 euros ha afectado positivamente en nuestra provincia a más de 160.000 trabajadores para afrontar más desahogadamente la cesta de la compra, pero hay que impulsar cláusulas de revisión salarial en los convenios ya que son un instrumento clave para proteger los salarios frente a las desviaciones de la inflación”.

Los convenios colectivos firmados en el ámbito de la Negociación Colectiva en Andalucia, a 31 de diciembre incluyen un incremento salarial ponderado de un 3,14%, casi seis décimas por debajo de la tasa de inflación interanual conocida hoy.

UGT  Almería insta a la Junta de Andalucia que se pongan en marcha las medidas para paliar los efectos de la inflación en las familias más necesitadas y vulnerables, aprobadas el año pasado, como el bono familia y el bono carestía, para combatir el riesgo de pobreza y vulnerabilidad social.