Andalucía debe enfrentar desafíos pendientes como el paro de larga duración o el aumento de salarios
El paro baja en 54.000 personas con respecto al trimestre anterior, un 7,40%, y se han creado 101.200 puestos de trabajo. Se baja de la barrera de los 700.000 parados. Es la cifra más baja de parados desde el II Trimestre de 2008 y récord histórico de ocupados.
Datos muy positivos, pero de los que no podemos estar plenamente satisfechos en Andalucía, que sigue estando como la comunidad autónoma con la mayor tasa de paro, cinco puntos por encima de la media nacional, (con 6 provincias entre las 10 con mayor tasa de paro de España), manteniéndose la brecha histórica con respecto al resto de regiones del país.
Además, existen retos del mercado de trabajo para nuestra Comunidad Autónoma que están presentes en los últimos datos de la EPA en el día de hoy, y que exigen que se corrijan de manera inmediata, como son el paro de larga o muy larga duración, con valores muy elevados, donde 4 de cada 10 personas paradas llevan más de un año buscando empleo (44,72% del total de parados en Andalucía), o la tasa de paro juvenil cercano al 40%.
Para afrontar y dar solución a este problema estructural en Andalucía, del mercado de trabajo, se necesita que se reformen las políticas activas de empleo y que se aumenten los recursos humanos y económicos del SEPE, para que puedan llevar una orientación laboral personalizada que mejore la empleabilidad de personas con desempleo.
Hay que seguir aumentando los salarios de la clase trabajadora andaluza. Tras conocer el último informe de Negociación Colectiva facilitado por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales, el Incremento Salarial Ponderado en los convenios colectivos vigentes hasta finales de junio es de 2,54%, por debajo de la tasa de inflación interanual del mismo mes (3,4%), y por debajo del criterio recogido en el V AENC (2022-2025), que establece un 3% para 2024, con una cláusula de revisión de un punto adicional para el caso de que el IPC supere este incremento.
Además, únicamente el 28,84% de los convenios vigentes tienen cláusulas de revisión salarial, ahondando aún más en la pérdida de salario real de los trabajadores andaluces. La situación es aún más preocupante, pues los últimos datos publicados por el INE referente al Índice de Precios del Trabajo reflejan una acumulación de pérdida de poder adquisitivo de la clase trabajadora andaluza, desde 2008 al 2022 (último dato facilitado), de 13 puntos porcentuales.
Debemos reconocer el valor que ha supuesto la reforma laboral de 2021 en el mercado de trabajo, especialmente en lo relativo a la reducción de la temporalidad. En este segundo trimestre de 2024, la tasa de temporalidad andaluza, se ha situado en el 20,4%, mientras que hace un año la misma era del 22,2%, es decir, la Reforma Laboral ha provocado que la temporalidad, haya caído dos puntos en el último año. La tasa de temporalidad en Andalucía en el IV Trimestre de 2021, fecha de entrada en vigor de la reforma laboral, era del 34,5%.
Por último, comentar que para que el despido sea la última opción de ajuste en la empresa y aumentar la protección de las personas trabajadoras, es fundamental que se modifiquen las causas y los costes del despido, de forma que se ajusten a los criterios de la Carta Social Europea Revisada, tal y como fue denunciado por UGT en marzo de 2022 ante el Comité Europeo de Derechos Sociales, el cual nos ha dado la razón en su última resolución sobre el coste del despido improcedente en España, debiendo ser una medida disuasoria para las empresas y reparadora del daño causado. Esperemos que, en próximas fechas, el Gobierno convoque el Diálogo Social para adaptar la legislación a lo que obliga Europa.
Valoración de Julián Vileya, secretario de Relaciones Laborales y Empleo de UGT Andalucía