El pacto no solo consolidaría miles de empleos transfronterizos, sino que además reforzaría los derechos laborales y sentaría las bases para una mayor cohesión territorial y social. La clave ahora está en que su desarrollo se lleve a cabo de forma efectiva, y que dentro de él se contemplen medidas concretas sobre la protección de los derechos laborales de los y las trabajadoras transfronterizas en el nuevo marco normativo y que se aproveche esta oportunidad para impulsar una zona más fuerte y diversificada en torno a Gibraltar.

Uno de los avances más significativos del acuerdo es que permitiría la libertad de paso diaria sin controles fronterizos terrestres para cerca de 11.000 trabajadores andaluces, que cada día cruzan desde municipios como La Línea de la Concepción, San Roque o Algeciras para trabajar en Gibraltar y otros 4.000 con pasaporte internacional que cruzan hacia España o hacia Gibraltar. En una comarca marcada por altas tasas de desempleo, esta medida puede contribuir a consolidar una fuente de empleo esencial para muchas familias.

No obstante, desde UGT Andalucía advertimos que aún es necesario conocer con mayor detalle cómo afectará este acuerdo a nivel laboral, en aspectos clave como la coordinación de la seguridad social, el acceso a servicios y el cumplimiento de las obligaciones medioambientales.

También hay que tener en cuenta que para que el desarrollo del acuerdo sea realmente beneficioso para los trabajadores y trabajadoras, es imprescindible incorporar la perspectiva sindical en todas sus fases por lo que es necesario el fortalecimiento de estructuras de diálogo y participación sindical, que garanticen la representación de las personas trabajadoras en el seguimiento y aplicación de los compromisos alcanzados.

Por otro lado, este es el momento idóneo para reactivar plenamente el Consejo Sindical Interregional (CSIR) del Sur, aprovechando los contactos mantenidos durante el último año con las organizaciones sindicales gibraltareñas y el impulso que brinda este nuevo escenario.

Este acuerdo, largamente esperado, debe servir como base para reforzar las relaciones transfronterizas, no solo desde el punto de vista político y económico, sino también en materia laboral y social. Es necesario que los derechos de estos trabajadores y trabajadores estén garantizados. Por ello es necesario un marco de seguridad jurídica y fiscal claro, que evite situaciones de precariedad y mantenga unas condiciones laborales dignas.

También es necesario que se concrete en medidas de mejora del transporte transfronterizo.