UGT Andalucía denuncia el repunte de la siniestralidad laboral en el primer semestre del año y exige medidas urgentes para frenar esta sangría
El sindicato alerta del preocupante balance de siniestralidad laboral registrado durante el primer semestre de 2025. En estos primeros seis meses del año, y a la espera de la confirmación oficial de los datos, se estima que han fallecido 53 trabajadores en Andalucía, de los cuales 12 lo han hecho en accidentes in itínere, una cifra que también muestra un crecimiento respecto al mismo periodo del año anterior.
Desde el sindicato se denuncia que el goteo continuo de accidentes laborales refleja que las medidas puestas en marcha para combatir esta situación, como el Plan de Choque contra la siniestralidad laboral, no han dado los resultados esperados. En pleno siglo XXI, resulta inasumible seguir enfrentándonos a accidentes y pérdidas humanas que, en la mayoría de los casos, podrían evitarse con una verdadera apuesta por la prevención, la formación y la protección de la salud de las personas trabajadoras.
UGT Andalucía advierte además de que esta situación puede agravarse en los próximos meses debido a las altas temperaturas que se están registrando. Muchas empresas siguen sin contar con protocolos específicos para trabajos con exposición al calor extremo, lo que pone en riesgo la salud y la vida de miles de trabajadores, especialmente en sectores al aire libre como la construcción, la agricultura o el transporte.
Por ello, desde UGT Andalucía se insiste una vez más en la necesidad de implantar la figura del Delegado o Delegada Territorial y/o Sectorial de Prevención, una herramienta clave para mejorar la prevención de riesgos laborales en las pequeñas y muy pequeñas empresas, que son precisamente donde se concentran la mayoría de los accidentes laborales y que constituyen el 98 % del tejido empresarial andaluz.
La organización sindical exige a las autoridades competentes y a las empresas que asuman de forma inmediata su responsabilidad y adopten medidas eficaces y urgentes para reducir la siniestralidad laboral.
Es imprescindible avanzar hacia una legislación más estricta en materia de prevención, dotar de más recursos y medios a la inspección de trabajo, y garantizar una inversión real y sostenida en la seguridad y salud laboral.
La protección de la vida y la integridad física de las personas trabajadoras debe ser una prioridad innegociable para cualquier sociedad democrática y avanzada.