UGT Andalucía defiende en el Parlamento una transición ecológica con justicia social
Con motivo del Día de la Madre Tierra, UGT Andalucía ha participado este martes en la reunión convocada por el PSOE andaluz con entidades y organizaciones ecologistas en el Parlamento andaluz. En representación del sindicato ha intervenido Rafael Gelo, secretario de Política Institucional de UGT Andalucía, quien ha reafirmado el compromiso de la organización con un modelo de desarrollo sostenible que sitúe a las personas trabajadoras en el centro de la transición ecológica.
Durante su intervención, Gelo ha presentado el Decálogo Sindical de Medio Ambiente de UGT Andalucía, una propuesta que nace del trabajo en el curso “Desarrollo Decálogo Sindical en la Negociación Colectiva Verde” que han dado comienzo este martes en Antequera. "Defender el planeta y defender el empleo no son caminos opuestos, sino luchas inseparables", ha afirmado.
El responsable sindical ha subrayado que el cambio climático ya está afectando directamente a miles de personas trabajadoras en Andalucía, a través de fenómenos como las olas de calor, las sequías, los incendios o la pérdida de cultivos. "Por eso, desde UGT Andalucía hablamos de ecosindicalismo: queremos una transición justa que no deje a nadie atrás", ha declarado.
Gelo ha planteado tres ejes de acción sindical para avanzar hacia esa transición justa: Incorporar cláusulas verdes en la negociación colectiva, para adaptar los centros de trabajo y reducir su huella ambiental; Fomentar la formación para el empleo verde, con trabajos cualificados, dignos y con derechos; Exigir la participación sindical en la planificación energética, la gestión del agua y la movilidad sostenible.
Además, ha defendido que "todos los empleos pueden y deben ecologizarse", señalando que no basta con crear nuevos empleos verdes, sino que es imprescindible "pintar de verde todos los trabajos existentes".
El decálogo elaborado por el sindicato aborda diez grandes retos: cambio climático, biodiversidad, agua, energías renovables, movilidad, economía circular, consumo sostenible, ecofeminismo, empleo verde y transición justa.
“No hay justicia social sin justicia ambiental. Y no habrá justicia ambiental sin la participación activa de la clase trabajadora”, ha concluido.