Entre los datos más relevantes conocidos hoy destaca el buen comportamiento de la demanda nacional, impulsada fundamentalmente por el consumo privado y la inversión. El consumo de los hogares mantiene un sólido crecimiento anual del 3,2%, mientras que la inversión registra un notable aumento del 8%, acelerando su ritmo en 2,1 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior. Como resultado, la demanda nacional ha aportado 3,8 puntos al crecimiento del PIB, mientras que la demanda externa ha restado un punto, una tendencia que se viene observando desde hace ya un año. Por el lado de la oferta, la actividad económica muestra un crecimiento generalizado en todos los sectores, salvo la agricultura, que registra un descenso anual del 2,1 %. En con

La economía española sigue inmersa en un ciclo expansivo en el que su crecimiento económico destaca si se compara con sus homólogos europeos, dado que registra el mayor aumento del PIB en lo que va de año respecto al resto de grandes economías. Además, lo hace mejorando en aspectos que reflejan un avance de la calidad de vida de las personas trabajadoras, como sucede con el consumo privado, que es la consecuencia de los avances en la estabilidad del empleo, de la mejora salarial y de la contención de las subidas de precios.

De hecho, los salarios crecen alrededor de un 3,5% en 2025, un avance impulsado por el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), que desde que se aprobó en 2023 ha permitido a muchas familias mejorar su capacidad de compra. Por otro lado, el nivel general de los precios ha ido moderándose hasta ser del 2,7% de media en lo que va de año. Es la diferencia entre ambas cifras lo que explica que buena parte de la población trabajadora puedan aumentar su consumo y, en consecuencia, la demanda interna.

También se está llevando a cabo un proceso de transición de modelo productivo que se apoya en el Plan de Recuperación que aprobó España en 2021 y cuyos fondos han ido permeando entre sectores muy relevantes para el medio y largo plazo, como el aeroespacial, el de microchips, vehículos eléctricos, etc. Sin embargo, su ejecución es mejorable y sigue siendo necesario elevar la inversión en capital productivo para poder generar mayores incrementos de productividad para mantener e incluso reforzar el ritmo de crecimiento actual y su capacidad para mejorar todas las rentas.

Por otro lado, que la demanda externa reste al crecimiento del PIB está íntimamente relacionado con el convulso escenario internacional en el que estamos inmersos, con un frenazo en el comercio internacional propiciado por las subidas arancelarias de Trump. Estos aranceles están obligando a renegociar las condiciones de manera bilateral mientras que la mayoría de países claman por un acuerdo comercial multilateral que fije un marco común estable, justo y duradero.

Pese al dinamismo que muestran los principales indicadores macroeconómicos, la buena marcha de la economía no está llegando todavía con la intensidad necesaria a la mayoría de la población asalariada, que sigue encontrando serias dificultades para llegar a final de mes. Esta brecha entre crecimiento económico y condiciones de vida obliga a impulsar con mayor ambición la subida de los salarios, comenzando por un nuevo incremento del Salario Mínimo Interprofesional acorde con la evolución de la economía y continuando con el conjunto de los salarios a través de la negociación colectiva sectorial, que debe reflejar de manera efectiva la mejora de la productividad y de los beneficios empresariales.

Al mismo tiempo, este contexto de crecimiento hace inaplazable afrontar con decisión el grave problema de la vivienda, que está lastrando las rentas de las personas trabajadoras y cerrando oportunidades vitales, especialmente a las personas jóvenes, que ven cada vez más difícil acceder a un proyecto de vida digno y autónomo.

Además, en el ámbito internacional, España debe apostar por crear unas condiciones de comercio que aporten certidumbre y seguridad sin imposiciones unilaterales. En este sentido, para UGT resulta fundamental avanzar hacia un nuevo modelo productivo basado en sectores de elevada productividad, salarios dignos y mejores condiciones de vida para el conjunto de las personas trabajadoras, y todo ello enmarcado en un contexto internacional menos beligerante y más colaborativo.

Datos

Los datos definitivos de la CNTR registran una tasa de variación anual del PIB del 2,8%, desacelerando una décima respecto al trimestre anterior (2,9%). Por su parte, la tasa de crecimiento trimestral se ha situado en el 0,6%, también una décima menos que la registrada en el segundo trimestre de 2025.

Por el lado de la demanda, el consumo final de los hogares aumenta en un 2,8% anual, dos décimas menos de lo que lo hacía el segundo trimestre del año, lo que muestra una leve moderación, si bien el crecimiento del consumo sigue resultando muy positivo para la economía española. La inversión crece en este caso un 8%, hasta dos puntos más respecto a la tasa del trimestre anterior. Por ello, la demanda nacional aporta 3,8 puntos al crecimiento del PIB anual, lo que significa que el sector exterior no ha contribuido al crecimiento en esta ocasión; de hecho, resta un punto, como viene siendo habitual en el último año. Eso sucede pese a que las exportaciones crezcan un 3,3% porque, en contraposición, las importaciones lo han hecho un 6,8%.

Por parte de la oferta, todos los sectores económicos presentan crecimientos trimestrales, salvo el primario, que cae un 2,1% anual. En este sentido, la construcción aumenta un 6,9%, el sector servicios un 3,1%, mientras que la industria lo hace un 3%, por un 2,8% de la rama de manufacturas.

Por último, respecto al empleo, las horas efectivamente trabajadas crecen un 2,5% anual y un 1% más respecto al anterior trimestre, lo que reafirma el buen momento que atraviesa el mercado laboral español. Por su parte, los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo registran un incremento anual del 3,3% y, en términos trimestrales, lo hacen un 1%. En total hay 21.043.700 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, que son 681.700 más que hace un año.