“Han pasado más de 40 años desde que se estableció la jornada laboral de 40 horas semanales, y, sin embargo, el tiempo que dedicamos al trabajo sigue prácticamente igual, a pesar de los enormes avances tecnológicos, sociales y productivos que hemos vivido”, subrayó Gelo, quien además denunció que el modelo laboral actual “agota la salud, limita la conciliación y frena el empleo”.

“Desde UGT Andalucía no nos vamos a cansar de decirlo alto y claro: reducir la jornada laboral no solo es posible, es urgente, es de justicia y es de sentido común”, afirmó. Gelo recordó que la reducción inmediata a 37,5 horas semanales sin reducción salarial es una reivindicación realista y viable, que ya se aplica en algunos sectores y grandes empresas tecnológicas.

El dirigente sindical explicó que reducir la jornada sin pérdida salarial es una cuestión de reparto justo del tiempo y del empleo, que además mejora la productividad, reduce el absentismo y el estrés, fortalece la salud laboral, crea empleo neto y favorece la sostenibilidad medioambiental.

Durante su intervención, Gelo dejó claro que la apuesta de UGT Andalucía va más allá, con el horizonte de alcanzar una jornada laboral de 32 horas semanales en cuatro días laborables. “Este es el futuro que merece la clase trabajadora”, enfatizó, destacando los beneficios ya demostrados por experiencias piloto de reducción de jornada: mayor productividad, más motivación, menor consumo energético, reducción de la huella de carbono y trabajadores y trabajadoras más felices.

“Reducir la jornada no es solo una demanda laboral, es una medida de salud pública, de igualdad y de conciliación. Es también una medida verde, que beneficia al planeta”, destacó Gelo, recordando que el 60% de las personas trabajadoras sufren estrés laboral y que cada día mueren dos personas en España por causas relacionadas con el trabajo. “Menos horas de trabajo significan más salud, menos accidentes y más vida”.

En su discurso, Gelo hizo un llamamiento a todas las personas y entidades para respaldar esta reivindicación. “La lucha por la jornada laboral es la lucha por el tiempo. Porque el tiempo no es oro: el tiempo es vida”, proclamó, citando al recientemente fallecido Pepe Mújica: “La gente no compra con plata, compra con el tiempo que tuvo que gastar para tener esa plata. No se puede despilfarrar ese tiempo, hay que dejarle tiempo a la vida”.

UGT Andalucía defenderá esta reivindicación no solo en la negociación colectiva y el diálogo social, sino también en la calle, en el Parlamento y en cada empresa. “Reducir la jornada laboral es repartir el empleo, ganar salud, cuidar el planeta, mejorar la vida y, sobre todo, dignificar el trabajo”, concluyó Rafael Gelo en la Asamblea de SUMAR e IU.