50 años del fin de la dictadura: memoria, democracia y el papel decisivo de Andalucía
Este 20 de noviembre se cumplen cincuenta años del final de la dictadura franquista, un periodo marcado por la ausencia de libertades, la censura y la vulneración sistemática de derechos durante casi cuatro décadas. Medio siglo después, es imprescindible recordar lo que supuso aquel momento histórico y el camino que abrió para la ciudadanía.
El fin de la dictadura permitió iniciar la Transición, un proceso complejo pero valiente que hizo posible recuperar derechos fundamentales, abrir espacios de participación democrática y reconstruir un país que llevaba años silenciado. La libertad, la pluralidad y el diálogo se convirtieron entonces en los pilares sobre los que se levantó la nueva España.
De ese proceso nació también el actual modelo autonómico, que reconoció la diversidad territorial y acercó las decisiones a la ciudadanía. Para Andalucía, este avance fue determinante: dejó atrás décadas de olvido institucional para contar con voz propia, competencias propias e instrumentos para defender sus intereses y desarrollar servicios públicos esenciales.
Cincuenta años después, el aniversario nos recuerda que la democracia no es un logro estático, sino una construcción diaria que requiere compromiso, responsabilidad y memoria. Revisar el pasado no es anclarse en él, sino fortalecer la defensa de una Andalucía y una España más libres, más igualitarias y más justas.