Este acuerdo responde al cumplimiento de la Ley 4/2023 para la igualdad real y efectiva de las personas LGTBI y del Real Decreto 1026/2024, y contempla medidas concretas en todas las fases de la vida laboral. En materia de acceso y selección, se establecen criterios objetivos y formación específica para evitar sesgos discriminatorios. En cuanto a promoción profesional, se garantizan procesos basados en méritos y cualificación, sin que la orientación, identidad o expresión de género puedan suponer una barrera.

El protocolo también incorpora módulos formativos sobre derechos LGTBI, prevención del acoso y uso de lenguaje inclusivo para toda la plantilla, especialmente para quienes gestionan equipos. Se reconoce además el acceso igualitario a permisos y beneficios sociales, incluyendo un permiso de 20 horas recuperables para el acompañamiento en procesos médicos relacionados con la transición de género.

En cuanto al régimen disciplinario, se establecen medidas sancionadoras claras frente a cualquier conducta de acoso o discriminación. Además, el acuerdo contempla un protocolo específico de actuación frente al acoso LGTBI, con procedimientos ágiles, confidenciales y con seguimiento activo por parte de la Representación Legal de las Personas Trabajadoras (RLPT).

Desde UGT se valora este paso como un avance fundamental en la defensa de los derechos de la comunidad LGTBI, y un ejemplo de cómo el sindicalismo puede liderar cambios reales hacia entornos laborales más respetuosos, igualitarios y comprometidos con la justicia social.