UGT y CCOO han alertado de que la situación que atraviesan miles de trabajadoras y trabajadores andaluces es insostenible. A pesar de la mejora de algunos indicadores macroeconómicos, la realidad diaria de la clase trabajadora sigue marcada por sueldos bajos, contratos temporales, jornadas interminables y precios disparados en vivienda, alimentación y suministros. “Hay empleo, sí, pero un empleo que no garantiza una vida digna. Cada vez más personas trabajan y son pobres al mismo tiempo. Esto no puede normalizarse”, han subrayado.

Especial preocupación han expresado ambos sindicatos por el repunte de la siniestralidad laboral. Andalucía sigue liderando el ranking de accidentes de trabajo graves y mortales, con sectores como la construcción, la agricultura o los servicios concentrando el mayor número de casos. Ambos sindicatos han sostenido que trabajar no puede suponer jugarse la vida. La prevención no puede ser un lujo, debe ser una prioridad real en todas las empresas, han denunciado.

Además, UGT-A y CCOO-A han denunciado el grave deterioro de los servicios públicos en Andalucía, con especial énfasis en la sanidad y la educación. Los recortes en contrataciones, el cierre de unidades en verano, la sobrecarga de trabajo del personal sanitario y docente, y la falta de inversión estructural están poniendo en jaque derechos fundamentales de la ciudadanía. Por ello, han exigido al Gobierno andaluz que debe dejar de mirar hacia otro lado. Defender la sanidad y la educación públicas es defender el futuro de esta tierra.

Empresas con conflictos abiertos y falta de diálogo social

Durante la reunión también se han abordado los numerosos conflictos laborales abiertos en empresas andaluzas, muchos de ellos derivados de la negativa de las direcciones empresariales a negociar mejoras salariales, aplicar la subida del SMI o cumplir convenios colectivos.

En este sentido, ambas organizaciones han hecho un llamamiento a la patronal andaluza a actuar con responsabilidad y abrir mesas de diálogo real, así como a la Junta de Andalucía para que deje de ejercer como mero espectador.

Reducción de la jornada laboral

Uno de los puntos centrales de la agenda ha sido la exigencia de que se apruebe ya la reducción de la jornada laboral legal a 37,5 horas semanales sin merma salarial, tal y como acordaron en su día los sindicatos con el Gobierno.

En Andalucía, esta medida beneficiaría a más de 2 millones de personas asalariadas, y sería un paso decisivo para conciliar la vida personal y laboral, reducir el estrés y la siniestralidad, y repartir mejor el empleo.

Ambos sindicatos han recordado que la jornada laboral en España no se ha tocado desde 1983, mientras que la productividad ha crecido gracias a la digitalización, la automatización y los cambios tecnológicos.

Finalmente, UGT y CCOO Andalucía han reafirmado su unidad de acción sindical y han llamado al conjunto de la sociedad a organizarse y defender una Andalucía más justa, más solidaria y más igualitaria. También han instado a la Junta de Andalucía y al Gobierno central a escuchar las demandas de la mayoría social y poner en marcha políticas valientes y transformadoras.

La dignidad del trabajo, la salud de nuestros servicios públicos y el derecho al tiempo deben ser ejes fundamentales de cualquier proyecto político con ambición de justicia social. No puede haber derechos sin recursos ni bienestar sin diálogo, concluyen ambas organizaciones.