Por grupos, vestido y calzado (-1,2%) ha sido el grupo que ha abaratado sus precios en mayor medida, cuestión habitual al adelantarse ciertas ofertas al habitual periodo de rebajas. Por el contrario, los alquileres de verano han provocado que el grupo vivienda (2,1%) pase ahora a registrar el mayor encarecimiento del mes.

 

En los últimos doce meses, las caídas de precios más destacadas continúan siendo las registradas en los transporte (-3,9%) y vivienda (-5,9%) mientras que, los mayores incrementos de precios vuelven a ser los protagonizados por alimentos y bebidas no alcohólicas (1,4%) junto con comunicaciones (1,8%).

 

Por provincias, durante el pasado mes de junio, los precios se incrementaron en todas las provincias andaluzas. La subida más destacada fue la obtenida por Córdoba y Granada  (ambas 0,5%). Por el contrario, el resto de provincias, menos Cádiz (-0,3%), obtuvieron una tasa mensual de inflación igual a la del conjunto de la Comunidad Autónoma (0,4%).

 

A lo largo del último año, Almería (-1,1%) vuelve a ser la provincia andaluza que registró la tasa más negativa, seguida, este mes, por Huelva y Jaén (ambas -1,2%). Igualmente, Cádiz (-0,6%) y Sevilla y Málaga (las dos -0,7%) destacaron por ser las provincias donde en menor medida se abarataron los precios. De esta forma, este mes, las diferencias interprovinciales se reducen y pasan a situarse en 5 décimas.

 

En cuanto a lo ocurrido con los alimentos de primera necesidad, durante el pasado mes de junio, las frutas frescas (5,3%) volvieron a registrar el incremento de precios más destacado. En sentido contrario, también hay que señalar el abaratamiento de otros productos como las legumbres y hortalizas frescas (-3,9%) o las patatas (-1,2%).

 

En términos interanuales, los aceites y grasas y las patatas y sus preparados (ambos 11,8%) fueron los alimentos más inflacionistas. A su vez, también durante el último año, las carnes de ave (-4,2%) y la de porcino junto con la leche (-3,3% las dos) fueron los productos en los que se registraron los descensos de precios más pronunciados.

 

En definitiva, desde la UGT-A estamos convencidos de que la tendencia actual que vienen reflejando indicadores como el propio IPC nos dan la razón en nuestra denuncia de que las políticas de recortes y de destrucción del Estado del Bienestar tienen un resultado negativo incluso en términos puramente economicistas.

 

Con los datos propios de este mes, sumamos ya 24 meses sin interanuales positivas. El nivel de actividad de la economía andaluza continúa a la baja, nuestras PYMES no cesan de cerrar y la precariedad se ha instaurado como principal protagonista de nuestro mercado laboral.

 

A pesar de la evidente ineficacia de estas políticas neoliberales, la UE, nuestros Gobiernos y los principales lobbys de poder económico a nivel internacional continúan enroscados en una defensa sin sentido de nuevas reformas económicas que, una vez más, contribuirán al empobrecimiento del conjunto de la ciudadanía sin querer ver que, ello no solo prolongará el actual ciclo de crisis, sino que volverá a poner en jaque incluso el propio proyecto institucional de construcción de Europa.

 

Es precisamente en estos momentos cuando los agentes sociales y, más especialmente, los sindicatos de clase, más tenemos que profundizar en el desarrollo de una contundente acción sindical.