Es necesario que los buenos datos de la economía reviertan en mejoras de las condiciones laborales
El PIB estatal se eleva ocho décimas con respecto al trimestre anterior, y el interanual mantiene el incremento del 3,5% registrado el trimestre pasado, en el avance conocido en el día de ayer. El IPC Adelantado sitúa su variación anual en el 3%, dos décimas más que el registrado en el mes de diciembre. La tasa de inflación vuelve a subir, como es tendencia en estos últimos meses, hecho que comienza a ser preocupante.
En la mañana de hoy hemos conocido el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo del mes de enero, así como el avance de los datos de la Contabilidad Nacional Trimestral del IV Trimestre de 2024, en el día de ayer, ambos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Dos indicadores que ponen de manifiesto la bonanza económica actual, situación que debe ser aprovechada para la mejora de las condiciones de vida de la población trabajadora.
Por un lado, el PIB estatal volvió a incrementar su ritmo de crecimiento y lo situó en el 0,8% con respecto al trimestre anterior, manteniendo el ritmo de aceleración mostrado en durante el año 2024. También es positiva la evolución de la tasa interanual del PIB que reflejaría, claramente, como la economía española mantendría su ritmo de crecimiento, situándose en el en el 3,5%. De esta forma el año 2024 se cerraría con un crecimiento medio del 3,2%.
Respecto a la información publicada en el día de ayer, la demanda nacional ha aportado 3,5 puntos al aumento del PIB, mientras que la demanda externa lo ha hecho en 0,0 puntos. En este sentido destaca el crecimiento anual en el consumo de los hogares y de la inversión, un 3,7% y un 3,6% respectivamente. Por el lado de la oferta, todos los sectores crecen con tasas anuales superiores al 2,3%, siendo especialmente llamativo el aumento del 4,4% del sector agrícola, 3,9% del sector servicios y del 2,9% del sector industrial.
Con la confirmación de los datos conocidos en el día de hoy, encadenamos más de cuatro años consecutivos en los que la producción industrial siempre supera a la del trimestre anterior. Este ciclo de mejora de la economía se ha conseguido no solo salvaguardando el empleo sino mejorando los datos de ocupación, incrementando el SMI, luchando contra la precariedad laboral a través del Diálogo Social y mejorando la calidad de vida de las familias trabajadoras.
En cuanto al IPC, de confirmarse estos datos, cuando conozcamos los valores definitivos a mediados de febrero, la inflación interanual volvería a subir, situándose en el 3,0%. Además, en términos mensuales, los precios se incrementan en dos décimas (+0,2%). Por su parte, la subyacente disminuye dos décimas situándose en el 2,4%.
El nivel general de precios aumenta, debido principalmente, al aumento de los precios de los carburantes, frente a la bajada de enero de 2024 y también, aunque en menor medida, a la subida de los precios de la electricidad, que suben más que en el mismo mes del año anterior.
En sentido contrario, destaca la influencia a la baja de ocio y cultura, cuyos precios se reducen más que en enero del año pasado.
A esto se une el elevado precio de la vivienda, siendo un bien inaccesible para muchos trabajadores.
En este sentido indicar que, desde UGT, se ha interpuesto una reclamación colectiva ante el Comité Europeo de Derechos Sociales para que el derecho a la vivienda sea realmente efectivo y no meramente declarativo, un derecho que se pueda ejercer y reclamar ante las administraciones públicas porque es un derecho humano básico fundamental, recogido en el artículo 31 de la Carta Social Europea, pero también el 25 de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Desde UGT Andalucía valoramos positivamente los datos conocidos en el día de ayer referentes al avance de la Contabilidad Nacional correspondiente al IV Trimestre de 2024 y de manera negativa el dato adelantado del IPC Adelantado del mes de enero conocido en el día de hoy. La economía española crece de manera continuada y con buenas perspectivas de futuro. De confirmarse estos datos, sería la economía europea que más ha crecido, todo ello gracias a las reformas y acuerdos alcanzados en el diálogo social. Sin embargo, el poder adquisitivo de la población trabajadora se ve mermada por la subida general de los precios.
El consumo en los hogares está siendo una parte muy importante de las aportaciones al crecimiento anual, debido fundamentalmente a la moderación en la inflación (habrá que ver la evolución del IPC en los próximos meses) y a los incrementos salariales registrados en la negociación colectiva. Sin embargo, en Andalucía, con datos cerrados a 31 de diciembre, el Incremento salarial ponderado fue del 2,65% por debajo de la media del IPC hasta ese mes, que se estableció en el 2,72%, y por debajo del criterio recogido en el V AENC (2022-2025).
Es por ello que entendemos que, tras los datos del IPC adelantado en el mes de enero, hay que incrementar los salarios de la población trabajadora andaluza para poder recuperar el poder adquisitivo perdido tras la pandemia y también es fundamental reducir el tiempo de trabajo para seguir manteniendo e incluso aumentando, los niveles de productividad actuales.
El aumento de salario real por parte de la clase trabajadora incidiría en el aumento en el consumo en los hogares andaluces y en el incremento del PIB regional. El año 2025 debe servir, también, para la mejora de aquellas debilidades de la economía española en general y de la andaluza en particular, como es el aumento de la inversión productiva, especialmente de la industria, para favorecer un cambio en el modelo económico que nos lleve a un empleo más estable y de mejor calidad.