El mes de noviembre registró un descenso del 0,1 del IPC, situando la tasa anual en el 1,7%, seis décimas por debajo de la registrada el mes anterior. El origen de este descenso se sitúa, fundamentalmente en los precios de los combustibles y la electricidad, aunque también contiene factores estacionales (como la evolución de los capítulos correspondientes a hoteles y restaurantes).

La situación, por tanto, se mantiene dentro de los parámetros previstos, haciendo perfectamente viable dar continuidad al objetivo de revalorización salarial y de rentas que UGT ha venido defendiendo tanto en las negociaciones con las organizaciones empresariales como en las negociaciones con el Gobierno de España.

Por tanto, el Sindicato se ratifica en su estrategia de negociación colectiva destinada a conseguir un salario mínimo de convenio de 1.000 euros al mes en catorce pagas; incremento progresivo del Salario Mínimo Interprofesional hasta situarlo en el sesenta por ciento del salario medio neto, así como la revalorización de las rentas y prestaciones de los sistemas de protección social conforme a la evolución del coste de la vida.