Para UGT Andalucía, sin duda los datos de la EPA del segundo trimestre del 2015 son positivos. La creación de empleo y el descenso del paro alcanzados en este trimestre ha sido importante. A pesar de ello, el problema está en el tipo de empleo que se crea. Un empleo precario, mal remunerado, temporal, a tiempo parcial, de baja cualificación y en actividades de poco valor añadido.

Los parados en Andalucía ascienden a 1.260.500. Se reduce el paro y la tasa de desempleo se sitúa en el 30,98%. A pesar del importante descenso, la magnitud de las cifras provoca que cualquier insinuación de que la crisis es ya una cuestión del pasado es un insulto a todos esos parados andaluces a los que no se les ofrece la más mínima posibilidad de acceder a un puesto de trabajo. Aunque a lo largo del pasado año logramos crear empleo, desde el comienzo de la crisis han sido 428.700 los empleos destruidos en Andalucía.

Los trabajadores temporales continúan viendo como sus precarios contratos dejan de renovarse al tiempo que se sigue haciendo un uso fraudulento de esta modalidad contractual. 96 de cada 100 nuevos contratos firmados en Andalucía son temporales.

Otro de los grandes aspectos que pone de manifiesto como la Reforma Laboral ha supuesto un ataque frontal a las condiciones laborales de los trabajadores, especialmente en Andalucía, es el desorbitado incremento de la ocupación a tiempo parcial frente a la ocupación a tiempo completo. Temporalidad y tiempo parcial han pasado a convertirse en las dos grandes características de la precaria contratación en Andalucía.

Los jóvenescontinúan siendo uno de los sectores de la población más castigados por la crisis. La tasa de paro juvenil es del 57,61 y cada vez son más las dificultades que encuentran para poder incorporarse a nuestro mercado laboral.

El aumento de los parados de larga duración que agotan sus prestaciones por desempleo continúa incrementándose y acelerando el crecimiento de la población andaluza en riesgo de pobreza y exclusión social. Según los últimos datos sobre hogares, en casi cinco millones de ellos no hay ningún activo.

A pesar de las cifras de paro, las cuestiones sociales continúan ocupando el último escalón en lo que a preocupaciones del Ejecutivo Central se refiere. Tasas de paro y cifras de destrucción de empleo como las que manejamos convierten en una atrocidad tan siquiera el insinuar el final de la crisis.

 

Informe de UGT Andalucía sobre la EPA del segundo trimestre del 2015