Pacto por Andalucía

El Ayuntamiento de Jerez coacciona a los trabajadores que acudan a las concentraciones de rechazo a los ERES

"Lista negra" y "represión" para los empleados municipales del consistorio jerezano que muestren su desacuerdo con los 390 despidos, es lo que ha ordenado el Gobierno local. La alcaldesa (PP) ha blindado los edificios municipales con efectivos policiales, al tiempo que ha pedido a los directores de áreas que hagan listados con los asistentes a las manifestaciones.

12/04/2012 |

Imagen de la manifestación de este miércoles a las puertas del consistorio jerezano
Imagen de la manifestación de este miércoles a las puertas del consistorio jerezano

Los sindicatos con representación en el Ayuntamiento de Jerez ya han anunciado que las protestas contra el ERE que deja en la calle a 390 trabajadores van a ser una constante hasta que retiren esta medida. El equipo de gobierno, lejos de dar muestras de diáologo, ha optado por incrementar más la tensión tratando a los manifestantes como delicuentes, habida cuenta del enorme despliegue policial, y exigiendo la elaboración de "listas negras" de aquellos trabajadores que acuden a las concentraciones pacíficas.

La sección sindical de UGT en el Ayuntamiento de Jerez ha mostrado su “más firme” rechazo a las medidas anunciadas por el equipo de Gobierno municipal del PP, que contempla un Expediente de Regulación de Empleo para 390 trabajadores. “En lugar de fomentar el empleo en sintonía con lo que preconiza el Gobierno de la nación, va directamente a incrementar las listas del paro de una ciudad que no soporta más esta lacra”. Así considera que el ERE es “una auténtica barbaridad que no solucionará la situación económica de nuestra ciudad sino que la agravará superlativamente”.

Asimismo, denuncia la actitud de “represión” del Gobierno municipal, que “ha mandado a la Policía para intimidar las concentraciones pacíficas” y “ha ordenado que se identifique a los trabajadores cuando acceden a su puesto de trabajo, instando a los directores de áreas a que hagan listados de las personas que hacen uso de sus horas para acudir a las protestas”. Todo ello, “para provocar miedo e incertidumbre”.

También criticaron la “falta de voluntad de negociación”, puesto que “dicen en los medios de comunicación que hay que negociar y que los sindicatos no tenemos voluntad pero luego su diálogo se limita a monólogos de 20 minutos”. Es más, desde la sección sindical recuerdan que desde que accedieron a la Alcaldía “no han convocado formalmente ninguna reunión de trabajo, no han presentado ni una sola propuesta por escrito, no han facilitado ni la más mínima información, aún cuando es solicitad por escrito”. Señalan que ha sido precisamente a instancias de UGT, CCOO y CTP que, “a regañadientes”, se ha celebrado una reunión de la comisión de seguimiento en donde los sindicatos han propuesto  medidas de ahorro, “sobre las cuales hoy no tenemos todavía contestación”.

Para la UGT “existe una falta total de respeto a los trabajadores que sólo se entiende desde la lógica de un partido político que ha llegado al Gobierno municipal instalado en la mentira y el engaño”, puesto que durante las elecciones municipales “no se cansaron de repetir que el capítulo 1 del Presupuesto Personal –referente a los gastos de personal- no era el problema y que exigirían al Gobierno central un estatuto económico especial para Jerez”.

Sin embargo, los acusan de “mirar para otro lado” y, su labor en Recursos Humanos ha consistido en “tomar medidas pseudo legales de traslados, cambios, ascensos e ignorar a quienes no los aplauden y otorgar nuevas productividades a los suyos”.

 En este sentido, “no han tomado ni una sola medida de calado porque lo han supeditado las necesidades de la ciudad a la agenda electoral de su partido”. De esta manera, denuncian que, desde que el Gobierno municipal tomó posesión, “se ha dedicado a generar cada vez más incertidumbre y a exagerar todo lo posible la situación, convirtiendo en misión imposible cualquier acuerdo razonable”.

Recordaron además que “ha roto unilateralmente el acuerdo con Diputación que nos ha excluido de la última operación financiera puesta en marcha por esta entidad y que anticiparía el 75% de la recaudación, como así ha ocurrido con el resto de ayuntamientos que mantienen el acuerdo”.

Transcurridos 10 meses de gobierno, “no han tomado decisiones de recortes justas, limitándose a recortes genéricos, como congelación salarial, eliminación selectiva de artículos del convenio, mientras continúan pagándose productividades y gratificaciones injustificables, horas extras abusivas y complementos personales”.

Así que ya que “existen graves problemas económicos” consideran que “lo menos lógico” es pedir un préstamo de 328 millones de euros con dos años de carencia en los que sólo se abonarían los intereses del 5% y a pagar en 8 años.  La suma total de los intereses ascenderían a 16,4 millones y durante ocho años habría que pagar 42,64 millones anuales, aseguraron. “La alcaldesa nos explicó que pretenden ahorrar en capítulo uno la suma de 33 millones”.

La plantilla del grupo municipal ronda los 2.500 empleados y pretenden despedir en una primera fase a 390, lo que supondría un ahorro de 15,6 millones, lo que es “prácticamente el coste de los intereses del préstamo”. Con todo, quedarían por recortar 17,4 millones a una plantilla de 1.680 empleados, lo que supondría “un descuento mensual de 715 euros al mes por persona y recordamos que hay personal un salario mensual de 1.050 euros”.