En el día de hoy UGT Málaga y PSOE nos hemos concentrado a las  puertas del Centro de Formación “Rafael Salinas” como rechazo a la sustitución del nombre de dicho Centro Público.

Nuestra provincia solo cuenta con un Centro público de formación profesional para el empleo que se quiere privatizar.

Desde UGT Málaga tememos que los planes para desmantelar servicios públicos del Gobierno de PP y Ciudadanos en Andalucía acaben llegando a este centro que depende de la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, y que es un referente en la formación profesional desde una gestión íntegramente pública.

La Formación para el Empleo ha sido castigada desde 2015, coincidiendo con la Regulación Actual del Sistema, la Ley 30/2015,  de 9 de septiembre, que regula el Sistema de Formación Profesional para el Empleo en el ámbito laboral, aprobada sin el apoyo de los agentes sociales, donde el gobierno apartó a los sindicatos y los empresarios de la gestión directa, y se abrió el sistema de formación para el empleo a la concurrencia competitiva. Desde esa fecha se ha demostrado que esa modificación legislativa, ha conllevado la práctica eliminación de actividades para la formación para el empleo.

El poco desarrollo normativo y la no aprobación de la Ley de Formación Profesional de Andalucía continúan ocasionando la ausencia de la formación para el empleo en Andalucía.

La figura de Rafael Salinas, que da nombre a este Centro de Formación, debe seguir siendo un orgullo para el mundo del trabajo, porque como sindicalista y político malagueño, uno de sus principales cometidos, fue trasladar a los trabajadores la necesidad de una formación que los capacitara para el desarrollo profesional y personal.

El suprimir a Rafael Salinas en la denominación de este Centro de Formación, es una ofensa a un hijo predilecto de la provincia de Málaga, y una ofensa a la clase trabajadora. No tiene justificación y es una muestra de la política excluyente y sectaria que la ultraderecha impone a nuestra Andalucía.