La precariedad laboral y la falta de prevención producen un incremento de los accidentes de trabajo

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Los retos que UGT plantea al nuevo Gobierno

18/08/2016 |

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Para UGT es esencial que el próximo Gobierno se comprometa a desarrollar un plan estatal de lucha contra la pobreza y la exclusión social, que asegure la alimentación básica y el acceso a bienes esenciales tales como el agua, la electricidad, el gas y la calefacción de las personas sin recursos, así como el acceso a derechos fundamentales como la educación de calidad, la protección universal de la salud, la protección de la vivienda evitando su pérdida o el establecimiento de ayudas de emergencia social para los ciudadanos y ciudadanas que no tienen recursos mínimos.

En el momento actual, se hace más necesario que nunca abordar las nuevas situaciones de pobreza que se están presentando en nuestro país, derivadas de la persistencia e intensidad del desempleo masivo y de larga duración y el recorte de los servicios y prestaciones públicas esenciales.

Para ello es preciso desarrollar una estrategia global que permita abordar la lucha contra la pobreza y la exclusión social de forma transversal, permitiendo identificar líneas concretas de actuación, con objetivos claramente diferenciados. Pero también incidir de manera específica sobre las políticas que mayor incidencia tienen en la vida cotidiana de las familias, que afectan a dos de sus necesidades básicas más elementales: la vivienda y el acceso a la energía.

El sindicato considera que es urgente desarrollar un plan estatal de lucha contra la pobreza que establezca medidas puntuales dirigidas a atenuar el impacto social negativo en los grupos más vulnerables y mitigar las consecuencias de la crisis en el momento actual.

Estas medidas deben garantizar el acceso a derechos fundamentales como la educación de calidad, la protección universal de la salud, la protección de la vivienda evitando su pérdida, y el establecimiento de ayudas de emergencia social, concebidas éstas bajo los criterios de suficiencia y universalidad para los ciudadanos y ciudadanas que no tienen recursos mínimos.

Para ello, se deberán incrementar estas ayudas, de tal forma que se garantice una alimentación básica para todas las personas miembro de la unidad familiar, y el acceso a bienes esenciales tales como el agua, la electricidad, el gas y la calefacción.

UGT destaca además la importancia de desarrollar un plan estatal para el desarrollo de parques públicos de viviendas en alquiler a disposición de los Ayuntamientos, que aseguren el derecho a una vivienda digna y adecuada para aquellas personas que carezcan de recursos y se encuentren en situación de necesidad, con especial protección de las y los menores. Así mismo, deberá contener planes viables de reestructuración de la deuda, quitas o dación en pago para aquellas personas cuyo pago les es imposible.

En esta línea, también es preciso establecer un procedimiento acordado entre las administraciones públicas y el sector financiero para acabar con los desahucios de primeras viviendas que no estén acompañados de una alternativa para los desalojados o llegar a acuerdos con el sector eléctrico y las administraciones públicas que garantice un mínimo social de suministro para combatir la pobreza energética.