En dicho sentido, la Secretaria General de UGT Málaga, señaló que según la última encuesta de condiciones de vida (publicada en mayo de 2016 pero con datos sobre ingresos del 2014) el porcentaje de población en riesgo de pobreza a nivel nacional es del 22,1% (0,1% menos que el año anterior, en el año 2008 se situaba en el 19,8%). Para los menores de 16 años esta tasa de pobreza alcanza el 28,8% (2 puntos más que en 2008). De igual modo, a nivel andaluz la tasa de pobreza se sitúa en el 35,7% (2,4 puntos más que el año anterior y 8,4 puntos más que en el 2008).

Jiménez continuó: "tenemos 53.2000 hogares con todos sus miembros en paro, y la tasa de paro de la provincia está en 25.26%, 6 puntos más que a nivel nacional (20%).  Por no hablar de que casi el 43% de los malagueños tuvieron salarios inferiores al SMI (10 puntos más que en 2008) y las percepciones salariales medias a lo largo de 2015 de casi 250.000 malagueños/as fueron de apenas 15.400 euros (un 17% inferior a la media nacional y un 7% menos que en 2008), o que la duración media de casi el 90% de los contratos por circunstancias de la producción en la provincia apenas alcanza a los tres meses, y cerca de un 70% es inferior a un mes. Y que el 40% de todos los contratos realizados son a tiempo parcial."

"La radiografía no puede ser más desalentadora, indicó la Secretaria General de UGT Málaga.  Desde las dos grandes centrales sindicales hemos solicitado reiteradamente al Gobierno un Plan de Choque que revierta esta situación. Lamentablemente sin éxito, empecinado como está en su discurso triunfalista a espaldas completamente de la realidad de la mayor parte de la población. Es prioritario rescatar a las personas de los tremendos daños sociales que ocho años de crisis y seis de políticas de recortes han ocasionado. Y eso no se logra únicamente desde el crecimiento económico (el cual, por cierto, es todavía débil y se pone en riesgo si es incapaz de llegar al conjunto). Son necesarias políticas que reviertan el daño ocasionado, lo que requiere de un pacto del conjunto de las fuerzas políticas para recuperar nuestros servicios públicos y nuestro sistema de protección social.

Necesitamos mirar hacia el futuro, y este no puede construirse con garantías si se obvia a la base social del país. Hay que derogar las dos reformas laborales que tanto daño han ocasionado, y mejorar el mercado de trabajo y el modelo de relaciones laborales con un Plan de Choque por el Empleo, aumentando el SMI hasta al menos el 60% del salario medio neto (800 euros al año en 2017). También hay que derogar la última reforma del sistema de Pensiones de 2013 y garantizar una Prestación de Ingresos Mínimos, acabar con los desahucios de primeras viviendas y garantizar la aplicación efectiva de la Ley de Dependencia. Así como combatir la pobreza energética".

Por último, la Sª General de UGT terminó: "tristemente, no hemos encontrado respuesta por parte del Gobierno a planteamientos que son de justicia y sentido común. El PP sigue en la tónica de su primera legislatura que tanto sufrimiento sin sentido ha causado, y pretende seguir imponiendo su modelo de destrucción de los servicios públicos esenciales, sin que hable siquiera de dar una respuesta contundente al fraude fiscal o tenga un posicionamiento sobre una reforma del sistema que permita una mejor redistribución de la riqueza. El proyecto político del PP sigue el continuismo de unas políticas nefastas para la clase trabajadora, sin que en este nuevo tiempo aporte nada, ni pretenda establecer fórmulas de diálogo con los agentes sociales. Nada hay de proyecto de país que nos incluya a todos, que genere esperanzas y expectativas de un futuro mejor. De solidaridad y lucha contra la desigualdad.   Nada de eso parece interesarle a este Gobierno, y por eso, CCOO y la UGT vamos a salir a la calle el jueves. Para hacérselo ver."