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La precariedad laboral y la disminución del poder adquisitivo de los trabajadores estancan la economía y se refleja en los precios

La precariedad laboral y la disminución del poder adquisitivo de los trabajadores estancan la economía y se refleja en los precios

Según los datos oficiales hechos hoy públicos por el INE, la economía andaluza ha finalizado el noveno mes del año con un incremento en los precios del 0,2%, dos décimas superior al del conjunto del Estado (0,0%). Así, Andalucía obtiene una tasa interanual de inflación del -0,1%, dos décimas por debajo de la estatal (0,1%) y también dos décimas menor a la registrada el mes pasado (0,1%). De esta forma, acabamos con una racha de 37 meses consecutivos con interanuales positivas, teniendo que retroceder, hasta agosto de 2016 (-0,1%) para encontrar otro mes en el que el nivel general de precios fue inferior al que se obtuviera un año atrás.

11/10/2019 |

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Por grupos, Ocio y cultura (-2,1%) tras el abaratamiento de los paquetes turísticos, junto con Vivienda (-0,7%), por la reducción en el precio de la luz han sido los únicos grupos con descenso de precios. Por el contrario, Vestido y calzado (6,3%), inmerso en la nueva temporada de moda y Enseñanza (0,5%), tras el inicio del nuevo curso escolar, son los grupos con mayor encarecimiento de precios.

En los últimos doce meses, solo ha descendido el precio en los grupos Vivienda (-6,0%) y Transporte (-0,3%). En sentido contrario, los mayores incrementos de precios fueron los protagonizados, nuevamente, por Hoteles, cafés y restaurantes (1,7%) y Medicina (1,6%).

Por provincias, durante el pasado mes de septiembre, los precios se incrementaron en todas ellas, siendo los aumentos más destacados los registrados por Granada (0,4%) y Córdoba (0,3%). Por el contrario, los encarecimientos más suaves se dieron en  Almería, Huelva y Jaén (las tres un 0,1%).

A lo largo del último año, en todas las provincias, menos en Málaga (0,2%), se han reducido los precios. Jaén (-0,5%) y Huelva (-0,4%) registras los descensos de precios más destacados con respecto a septiembre de 2018. De esta forma, las diferencias interprovinciales se reducen una décima para situarse en siete.

En cuanto a los alimentos de primera necesidad, en el final del periodo veraniego, la carne de ovino y las frutas frescas (ambos un 2,1%), junto con la carne de vacuno (0,8%) y el agua mineral, refrescos y zumos (0,7%), registraron los incrementos de precios más destacados. En sentido contrario, debemos también reseñar el abaratamiento de productos como las patatas y sus preparados (-2,5%), los cereales y sus derivados (-1,9%) y los aceites y grasas (-1,4%).

En términos interanuales, las patatas y sus preparados (7,5%), las legumbres y hortalizas frescas (6,4%), y la carne de porcino (5,1%) continúan siendo los productos más inflacionistas. En cuanto a los descensos de precios, los aceites y grasas (-13,2%) y las frutas frescas (-6,5%), vuelven a ser los alimentos con las bajadas de precios más pronunciados con respecto a septiembre del pasado ejercicio.

Otras cuestiones que, además del Índice General de Precios, afectan a nuestro poder adquisitivo de forma importante:

Los carburantes han  visto reducidos sus precios durante la mayor parte del mes, aunque con cuatro suelos puntuales muy remarcados. El diesel, por ejemplo con un comportamiento similar al del resto de carburantes, ha pasado de 1,228 € al finalizar agosto, a terminar septiembre en 1,218 €, alcanzando el 1,192  en la parte inicial del mes.

El Euribor a un año, tras seis descensos mensuales consecutivos, pasa a verse incrementado en esta ocasión para situarse en -0,339. A su vez, continúa situándose por debajo del que se registrara hace justo un año, en septiembre del pasado año (-0,166) volviendo a suponer una reducción de la cuota mensual de las hipotecas que sean revisadas ahora.

El recibo de la luz se ha visto encarecido en septiembre en 11 CCAA, entre ellas Andalucía, fruto del abono de un suplemento territorial relacionado con los peajes de acceso que no se aplicó en el año 2013. Sin contar este concepto, la electricidad ha marcado en septiembre su menor valor de los últimos 18 meses, con un descenso del 6,3% sobre su coste en agosto y un 41% inferior a la cifra que se registraba en septiembre del pasado año.

En definitiva, desde UGT Andalucía entendemos que la evolución del nivel general de precios no es más que un reflejo de lo que viene ocurriendo en el conjunto de la economía andaluza: el crecimiento económico se debilita sin que el mismo haya llegado a tener efectos positivos generalizados sobre las economías domésticas en general y sobre la clase trabajadora en particular. 

De hecho, tenemos que retroceder más tres años, hasta agosto de 2016, cuando la interanual se situaba en el -0,1% y el fantasma de la deflación planeaba ya sobre el horizonte económico, para encontrar una tasa interanual de inflación negativa, la misma que la publicada hoy por el INE para nuestra Comunidad Autónoma.

Según hemos conocido esta semana, las consecuencias de la crisis siguen teniendo efectos sobre las variables macroeconómicas y ampliando la brecha entre las regiones ricas y pobres, tanto en el Estado, como en el conjunto de la UE. Aunque en las 17 CCAA ha incrementado el PIB per cápita en los últimos diez años, la situación relativa de todas ellas, con respecto a la UE, se ha visto empeorada. El estudio publicado por Eurostat alerta de que Francia y España son dos de los países donde más se está ampliando estas desigualdades entre regiones ricas y pobres. Una vez más, Andalucía continúa en el furgón de cola de esta clasificación.

También queremos aprovechar la publicación del IPC para llevar a cabo una reivindicación sindical de primera necesidad: hay que retomar el sistema de revalorización de las pensiones en base al IPC real. Desde UGT Andalucía exigimos, al Gobierno que se forme tras los nuevos comicios generales, que una de las primeras medidas a llevar a cabo sea la elaboración de una proposición de Ley, con el mayor respaldo político posible, que devuelva la dignidad a nuestros pensionistas evitando que sus pensiones pierdan poder adquisitivo.

El fantasma de una nueva crisis vuelve a planear sobre el mapa de la UE, poniendo de manifiesto que las crisis institucionales, la parálisis política y la pérdida de poder adquisitivo de la mayor parte de la ciudadanía, en paralelo con una drástica disminución de las políticas sustentadoras del Estado del Bienestar, provocan que el crecimiento económico tenga un periodo de vida muy limitado. Solo haciendo que el conjunto de los ciudadanos vean mejorada su nivel de vida, de manera proporcional a la que se incrementan las cifras macroeconómicas, lograremos dotarnos de un modelo económico firme, sostenible y duradero, capaz de hacer frente a los caprichosos vaivenes cíclicos de la economía de mercado.