Comunicados

Las rebajas del sector textil vuelven a jugar un papel fundamental en el descenso de precios de enero (-1,5%)

Según los datos oficiales hechos hoy públicos por el INE, la economía andaluza ha iniciado el año con un descenso en los precios de un 1,5%, frente al -1,3% del conjunto del Estado. Así, Andalucía obtiene una tasa interanual de inflación del 0,8%, dos décimas inferior a la obtenida a nivel estatal y a la registrada el mes pasado (1,0%). De esta forma, encadenamos ya 29 meses con un nivel general de precios superior al del mismo mes del año anterior.

15/02/2019 |

Imagen noticia

Por grupos, Vestido y calzado (-16,4%), coincidiendo con las rebajas de enero, ha sido el grupo que ha tenido una mayor relevancia en la caída de precios, junto con el grupo Ocio y cultura (-2,0%) y Menaje (-0,7%). Comunicaciones (0,5%) y Bebidas alcohólicas y tabaco (0,3%)  se sitúan, en esta ocasión, como los únicos grupos con incremento de precios en este inicio de año.

En los últimos doce meses, solo ha descendido el precio en los grupos Ocio y cultura (-1,5%) y Transporte (-1,0%). Los mayores incrementos de precios fueron los protagonizados por Vivienda (2,7%) y Hoteles, cafés y restaurantes (2,6%).

Por provincias, durante el pasado mes de enero, los precios se redujeron en todas ellas. Los descensos de precios más importantes han sido los registrados en Granada (-1,8%), junto con Jaén y Almería (ambas -1,7%).

A lo largo del último año, en todas las provincias se han incrementado los precios. Granada y Málaga (1,0%) destacan  por ser las provincias más inflacionistas mientras que, Cádiz (0,2%), registra, con gran diferencia, el incremento más reducido. De esta forma, las diferencias interprovinciales se elevan dos décimas sobre las alcanzadas el mes pasado y se sitúan en ocho.

En cuanto a los alimentos de primera necesidad, durante enero, las frutas frescas (-3,2%) y, en menor medida, la carne de ovino (-1,1%), registraron los descensos de precios más destacados. Por el contrario, es de reseñar igualmente el encarecimiento de productos como las legumbres y hortalizas frescas (2,8%) y las patatas y sus preparados (1,4%).

En términos interanuales, las patatas y sus preparados (12,9%), las frutas frescas (7,0%) y las legumbres y hortalizas frescas (4,8%) fueron los productos más inflacionistas. Los aceites y grasas (-12,3%) y el pescado fresco y congelado (-3,3%), son los alimentos con los descensos de precios más pronunciados con respecto a enero del pasado año.

Otras cuestiones que, además del Índice General de Precios, afectan a nuestro poder adquisitivo de forma importante: Los carburantes se han visto encarecidos a lo largo del mes de enero de manera importante y generalizada. El diesel, ha pasado de 1,121 € al finalizar diciembre a 1,181 € el 31 de enero, llegando a cotizar incluso a 1,161 al inicio del mes.

 El Euribor a un año, se ha vuelto a incrementar por décimo mes consecutivo y se sitúa en -0,116. Por quinta vez también consecutiva, el Euribor es mayor al registrado hace un año, lo que se traduce en un incremento de las cuotas mensuales de las hipotecas que tocan ser revisadas.

El recibo de la luz a pesar del incremento registrado en el coste de la energía durante la primera semana de enero, ha vuelto a verse reducido y encadena ya 4 meses de reducción. En enero, el recibo de la luz ha sido un 0,46% más barato que el mes pasado. A pesar de ello, el precio de la electricidad que pagamos ahora las familias trabajadoras es un 5,06% superior a lo que pagábamos en enero del pasado año.

Como ya anunciamos en el informe de IPC del mes pasado,  el inicio de un nuevo año natural vuelve a venir acompañado del encarecimiento de algunos bienes y servicios que, ahora ya sí, han tenido repercusión en el IPC de enero: el servicio de taxi se encareció entre un 2,6% y un 7,2%; los peajes suben prácticamente un 1,67% (1,91%); los precios del servicio de Correos son ahora un 9% más caros que al finalizar el pasado año y los billetes regionales de RENFE nos cuestan ahora un 3,5% más que el año pasado y los AVANT un 7%.

En definitiva, la economía crece desde 2014 pero lo riqueza generada no se traslada a las familias trabajadoras andaluzas ni a la gran mayoría de la sociedad, y eso pese a ser los principales perjudicados por la anterior crisis. Por este motivo, frente a los datos de inflación que hemos conocido hoy, UGT Andalucía centra sus reivindicaciones sindicales en exigir un justo reparto de la riqueza que se está generando, así como la inmediata recuperación de los derechos sociales y laborales pisoteados bajo la excusa de las dificultades económicas.

Pero para el logro de este objetivo es fundamental acabar con las reticencias de los empresarios a aplicar una nueva política salarial y, más específicamente, los salarios mínimos pactados en los convenios colectivos, así como la inclusión en los mismos de clausulas de revisión salarial que salvaguarden el poder adquisitivo de los trabajadores frente a procesos cíclicos no previstos.

De forma concreta, tanto en las negociaciones colectivas en marcha con la patronal, así como en el proceso de diálogo social con los distintos Ejecutivos, exigimos: Ningún salario por debajo de 1.000 euros al mes (14.000 € anuales); Incremento salarial pactado en convenio del 5%; Establecimiento de cláusulas de revisión salarial claras y efectivas; Continuar incrementando el SMI hasta alcanzar lo establecido en la Carta Social Europea; Reformar las Prestaciones Públicas por Desempleo incrementando cuantía y cobertura

Es el momento de pasar a la acción en defensa de nuestros derechos laborales e intereses económicos: más hechos y menos palabras.